PENSAMIENTO BREVE

Continuamente estamos realizando especulaciones, sobre lo que nos sucede en el día a día. Recibimos "mensajes" o "señales" que nos indican caminos por los cuales podemos dirigirnos y poder tener nuestro espíritu acogido por la presencia de nuestros "angeles" personales y sin embargo, nos negamos u omitimos esos momentos con asiduidad ya que nuestra mente casi siempre está dispersa y atenta a las vanalidades terrestres, que nos impiden evolucionar como seres conscientes. El arrojo con el que percibimos esos momentos, son valorados de una forma efimera por nosotros mismos y los "apartamos" sin ruborizarnos, sin pensar en que son momentos muy pequeños que pasan fugazmente y de los que siempre, he dicho siempre podríamos haber aprendido algo. No voy a ser yo, quien interprete esos momentos que simulamos no ver, al contrario, los valoraré como si aunque hubiesen pasado, no se hayan ido...y estarán flotando frente a nosotros el tiempo que sea necesario hasta que intentemos comprenderlos, llevarlos del brazo, apropiarse de ellos e impedir que se escapen de nuevo. ¿Quizás entonces seamos huerfanos de nuestras "señales" y de nuestros "mensajes"? La humedad de nuestros actos, son los que nos mantiene hidratada la mente, llevemosla siempre con nosotros e impidamos que se seque, nuestra necesidad de aprender.